Como parte de su plan de expansión en Sudamérica, Ball Corporation invertirá US$ 90 millones en su primera planta de latas de aluminio para bebidas en Perú. En dos meses, la empresa prevé iniciar las obras en Chilca a fin de operar la fábrica desde mediados del 2023.

Daniel Figueiredo, director comercial en Ball Corporation para Sudamérica, dijo que la demanda de empresas de bebidas y el creciente consumo de líquidos en latas por practicidad y motivos de sostenibilidad determinaron tal inversión. En Perú, el grupo ya abastece a diversos clientes.

“En algún momento tuvimos un centro de distribución en Perú, fue como un laboratorio para ver el mercado. La idea ahora es atender a los clientes cautivos, estar más cerca; y traer más disponibilidad”, comentó.

De esta manera, la planta con un área de 95,000 m2- tendrá una capacidad de más de 1,000 millones de latas para bebidas en diferentes tamaños al año.

“El aluminio hace tres o cuatro meses tuvo un precio histórico al alza, pero ya vemos una mejora o estabilización de ese crecimiento, inclusive con tendencia a la baja. No es algo que nos asuste, miramos mucho el largo plazo”, anotó.

Proyecciones

Tras consultar por las expectativas con la nueva fábrica en Perú, Figueiredo proyecta atraer más clientes que se suman a la tendencia de las bebidas listas para tomar en latas. Si bien la instalación apunta al mercado local, tampoco descartó exportaciones a países vecinos.

“Perú es un mercado muy estratégico, está un poco más cerca de Ecuador, también de Colombia, entonces pensamos en esa cobertura en la región”, dijo, tras mencionar que Ball Corporation tiene 15 fábricas en Brasil, Chile, Argentina y Paraguay.

En América del Sur, Ball Corporation ve un creciente consumo de bebidas en lata de aluminio en Chile, Brasil y Perú, más allá de las gaseosas y cervezas. En el mercado local, Daniel Figueiredo resaltó el desarrollo de cada vez más presentaciones personales de pisco en lata; y quieren apoyar el crecimiento del vino en lata.

Por último, indicó que buscarán impulsar el desarrollo local del agua en lata, que viene creciendo en Brasil y Chile por su componente de sostenibilidad. Y es que, en el mundo, el 70% de estos envases se reciclan, mientras que en Sudamérica llega al 90%.