Desde hace años somos testigos de cómo la automatización y la sostenibilidad incrementan su presencia en la cadena logística. Un mayor número de empresas las incorporan en sus estrategias logísticas para ganar eficiencia en sus procesos y, asimismo, responder a las exigencias corporativas y de consumidores cada vez más interesados en aspectos de responsabilidad ambiental y social.

Automatización intralogística

En las actividades dentro de un almacén, los sistemas logísticos automatizados están marcando la tendencia a nivel mundial, pues aumentan la eficiencia y precisión en las operaciones, además de mejorar la seguridad y reducir los costos operativos a largo plazo.

La empresa de origen alemán y con presencia directa en Perú ofrece una amplia oferta de sistemas logísticos automatizados, desde sistemas de almacenamiento automatizado de palets y estanterías, hasta sistemas de transporte autónomos.

«Nos enfocamos en integrar soluciones que optimicen el uso del espacio, reduzcan los tiempos de operación y minimicen errores. La clave es personalizar lo que el cliente necesita», indica Lauro Carvalho, Gerente de Marketing y Entrenamiento en Jungheinrich Latam, quien asegura que el «futuro de la intralogística es la automatización».

La compañía tiene un innovador portafolio que incluye transelevadores, vehículos guiados automatizados (AGVs) y un software de gestión de almacenes (WMS), los cuales facilitan un manejo más rápido y preciso de los productos.

Por medio de estos sistemas, los materiales se mueven de manera constante y sin interrupciones, lo que reduce tiempos «muertos» y aumentan la capacidad de procesamiento sin necesidad de ampliar el almacén. Además, al integrar sistemas de control inteligente, se coordinan de forma eficiente todas las áreas del almacén, lo que ayuda a maximizar la productividad y mejorar el rendimiento general de las operaciones.

«Mediante la automatización de procesos fundamentales como el almacenamiento y el transporte interno de mercancías, hemos conseguido optimizar al máximo el aprovechamiento del espacio, acortar significativamente los tiempos operativos y reducir al mínimo los errores humanos», subraya Lauro Carvalho.

En vista de que cada cliente tiene una operativa y requerimientos específicos, Jungheinrich personaliza sus soluciones de automatización según las necesidades de cada uno. La empresa diseña y entrega soluciones a medida luego de una exhaustiva evaluación de las operaciones, el flujo de trabajo y metas de crecimiento de cada negocio.

«Al adaptar cada componente, no solo optimizamos la eficiencia y seguridad, sino que también garantizamos una automatización escalable que crece junto con el negocio del cliente. Y lo mejor, todo en un solo proveedor, hablando con una única persona, sin intermediarios», apunta.

Los AMR

Los Robots Móviles Autónomos (AMR) están diseñados para navegar por almacenes y mover mercancías de manera eficiente, respondiendo de forma autónoma a los cambios en el entorno. Interactúan también con sistemas que utilizan inteligencia artificial para coordinar sus actividades en tiempo real, maximizando la eficiencia y minimizando los errores.

Los AMR de Jungheinrich han mejorado significativamente la eficiencia y seguridad operativa de sus clientes en Chile y Brasil. De acuerdo con Lauro Carvalho, un factor clave ha sido la consultoría personalizada de “flujo de materiales”, que permite diseñar soluciones ajustadas a las necesidades específicas de cada operación.

«Nuestros AMR han optimizado el uso del espacio, reducido tiempos de movimiento y mejorado la productividad sin necesidad de expandir los almacenes, además de minimizar riesgos laborales asociadas a la intervención humana. Con esta combinación, hemos logrado operaciones más ágiles y eficientes, garantizando un mejor retorno de inversión», resalta.

Hoy, Jungheinrich busca expandir esta tecnología en Perú. Con un enfoque de penetración gradual en el mercado nacional, empezará con empresas líderes en sectores clave ofreciendo su consultoría de “flujo de materiales” para identificar áreas donde la automatización puede generar un mayor impacto.

«Esto nos permitirá adaptar nuestras soluciones a las necesidades específicas del mercado peruano. Los sectores con mayor potencial para esta tecnología en Perú incluyen el retail y e-commerce, donde los AMR pueden optimizar la gestión de inventarios y agilizar los procesos de picking y distribución en centros logísticos. También vemos grandes oportunidades en el sector alimenticio y farmacéutico, donde la precisión y la rapidez son esenciales para gestionar productos perecederos y sensibles, mejorando la trazabilidad y la eficiencia operativa», detalla.

No solo las grandes empresas tienen la oportunidad de implementar esta tecnología. Las pequeñas y medianas empresas que quieran dar un primer paso hacia la automatización, pueden empezar con los AMR, pues es una solución flexible y escalable, por lo que les permite incorporar la automatización de manera gradual, fortaleciendo su competitividad en el mercado.

«Estamos convencidos de que la automatización no es exclusiva de las grandes empresas. Las pequeñas y medianas empresas también pueden obtener grandes beneficios de soluciones automatizadas», menciona.

Los AMR trabajan con sensores inteligentes y tecnología IoT para que todo el ecosistema logístico esté interconectado. Por ejemplo, los montacargas, y robots pueden comunicarse entre sí y con el software de gestión del almacén (WMS) para asegurar un flujo continuo de materiales y productos.

Equipos eléctricos: Eficiencia y sostenibilidad  

Jungheinrich no produce ningún montacargas de combustión en el mundo desde el 2023. En su lugar, los equipos eléctricos con batería de litio que pone al mercado permiten una mayor autonomía, menos tiempo de carga y un consumo energético reducido, haciendo que las operaciones de almacenamiento sean más limpias y rentables.

Asimismo, sus equipos eléctricos generan menores costos de mantenimiento y una mejor calidad de aire en los entornos de trabajo. Además, la empresa ha podido comprobar que generan menos ausencias y una mayor productividad, puesto que su utilización mejora la calidad de vida de las personas al no contaminar el aire y ser más ergonómicos. 

«Nuestros clientes lo han recibido muy bien, si bien es cierto que aún la flota de combustión de América latina es el 50% de los equipos estamos avanzando rápidamente en este importante cambio hacia la electrificación. La transición de las máquinas de combustión a las eléctricas es fundamental para el futuro de la intralogística y la sostenibilidad empresarial en general», refiere Lauro Carvalho, Gerente de Marketing y Entrenamiento en Jungheinrich Latam.

En línea con su compromiso de sostenibilidad por medio de sus montacargas eléctricos y con el objetivo de incentivar esta tecnología, la empresa lanzó una campaña de arborización en todo Latinoamérica. 

«Por cada equipo a combustión que cambiamos a eléctrico, Jungheinrich planta 30 árboles en nombre del cliente que realizó el cambio y próximamente también plantaremos 5 árboles por cada nuevo equipo que sea eléctrico», precisa.

La campaña inició en el año 2021. Han plantado más de 33,000 árboles hasta agosto de 2024 en Sudamérica y han preservado más de 760,000 árboles necesarios para la neutralización de CO2. En Perú, en el mes de mayo iniciaron la campaña y han plantado 112 árboles de tipo molle en la comunidad de Villa Mercedes al Sur de Lima.

Para mitigar su huella de carbono, la empresa también ha adoptado energías renovables en sus fábricas y centros logísticos. La compañía ha establecido un compromiso de neutralidad climática para 2030, en el que se propone neutralizar el 100% de sus emisiones. Además, el 99% del material utilizado en sus fábricas es reciclado o reutilizado.

Como parte de su pilar orientado a la sostenibilidad, Jungheinrich también ejecuta programas de reacondicionamiento de equipos usados. Estos programas le permiten extender el «ciclo de vida» de los montacargas al ser reutilizaos en lugar de ser desechados, reduciendo el desperdicio y el impacto ambiental asociado con la fabricación de nuevos equipos. «Se compromete a la sostenibilidad extendiendo el ciclo de vida de sus productos. Menos desperdicio, más valor», remarca.

Salud y bienestar de los operarios

Jungheinrich prioriza el bienestar de los operarios por medio de una gestión rigurosa de la ergonomía, crucial en actividades de almacenamiento, manejo y transporte interno de materiales y productos. Esta disciplina se centra en el diseño de lugares de trabajo, herramientas y tareas que se ajusten a las capacidades y limitaciones humanas.

1. Mejora la productividad. Las acciones repetitivas y el manejo de cargas pesadas se optimizan para reducir el esfuerzo físico y minimizar los movimientos innecesarios, lo que resulta en una mayor velocidad y precisión en la realización de las tareas.

• Reduce lesiones. Implementando soluciones ergonómicas, como sistemas de levantamiento asistido, mesas ajustables en altura y equipos de transporte ergonómicos, ayuda a reducir significativamente el riesgo de estas lesiones, promoviendo un entorno de trabajo más seguro y saludable.

• Aumenta la satisfacción. Los trabajadores que se sienten cómodos y seguros en su entorno laboral tienden a estar más satisfechos con su trabajo, lo que puede llevar a una mayor motivación y compromiso.

• Finalmente, produce eficiencia en el uso del espacio y los recursos.