Edilberto Soto Tenorio, Presidente de la Coordinadora Nacional de Productores de Papa del Perú (Corpapa) y promotor de Tiyapuy, nos comenta: “La papa es un alimento ancestral que está muy vinculado a nuestra vida y es de mucha importancia para nosotros. Soy el único de los hermanos que he regresado al campo para dedicarme a la papa junto con los pequeños agricultores”.

Así fue como nació ese amor inmenso al cuidado, siembra, cosecha, producción y comercialización de este alimento peruano famoso, que se sirve en las mesas de todos los países del mundo.

No es casualidad que nuestras tierras alberguen más de 4 mil variedades de papa. Edilberto Soto, también promueve el consumo de papas nativas, que se comercializan en los principales supermercados de todo el Perú y surcan los aires a través de los vuelos de Latam Airlines.

Expansión comercial

El representante de Corpapa se muestra muy optimista respecto al crecimiento de este producto andino. “Creo que es un camino importante para la exportación de papas nativas peruanas, a partir de la fecha va a empezar a fortalecerse e incrementarse”, acota.

Por su parte, Tiyapuy ha crecido de forma sostenida y enérgica a un ritmo de 46% en los últimos 3 años. El ejecutivo sostiene que para inicios de 2024 se tiene previsto la culminación de una nueva planta de producción en Lurín, que permitirá generar volúmenes superiores a las 20 mil toneladas de papa al año.

Mientras tanto, alista la mejor oferta de sus productos para exhibirla en el pabellón Ayacucho en la edición 2023 de la Expo Alimentaria, junto con 20 marcas de su región.

Niveles de exportación

Según cifras de la Asociación de Exportadores (ADEX), la exportación de la papa llegó a US$542 mil en el primer trimestre del año. El ejecutivo de Corpapa sostiene que la papa debe convertirse en un instrumento de superación de la pobreza.

“Hay que globalizar la papa peruana, eso cambiará la vida de los pequeños agricultores, y generar toda una actividad productiva con precios justos. Nosotros vemos con mucha esperanza que la papa empiece a aparecer en las cifras de exportación”.

De hecho, afirma que las exportaciones de papas nativas representan el 25% de su producción anual. Una vez culminada su planta de Lurín, prevé aumentar su producción para atender la demanda creciente en distintos países.

La ruta de la papa

Desde 2019, Edilberto Soto, fue el principal impulsor de La ruta de papa, marca registrada en Indecopi, cuyo recorrido conecta el turismo con la gastronomía y permite conocer de cerca el proceso productivo de siembra y cosecha.

Esta ruta que se realiza en varias locaciones de la región Ayacucho, es muy visitada por cientos de familias, parejas, turistas nacionales y extranjeros, y estudiantes de gastronomía.

La visita empieza en las montañas de esta región, a unos 4,200 m. sobre el nivel del mar; con el avistamiento de papas silvestres, luego los turistas conocen el calendario gastronómico y agronómico para ver el comportamiento del clima, una construcción histórica que fue reconocida como Patrimonio Cultural de la Nación en 2004.

En el recorrido no podría faltar un desayuno temático con las variedades de papa que se producen en la zona.

Fenómeno del Niño

Hace unos meses el Instituto Nacional de Estadística e Informática reveló que la producción de papa en el país disminuyó en un 22,09% como consecuencia del retraso de siembras y cosechas de la presente campaña agrícola, así como por las desfavorables condiciones climáticas, es decir la ausencia de lluvias en las zonas andinas del país, lo que no permitió que se desarrollara y fortificara el cultivo durante los primeros 5 meses del año.

Al respecto, Edilberto Soto refiere que eso fue algo circunstancial y que los promedios históricos de la producción nacional se vienen incrementando. “La papa está superando los 6 millones de toneladas de producción, somos líderes en América Latina desde hacer varios años.”, remarca.

Sin embargo, agrega que las 700 mil familias involucradas en la producción del tubérculo han tenido que enfrentar algunas situaciones adversas vinculadas con los fertilizantes o heladas producto del cambio climático. Pese a eso, su optimismo es más fuerte que las montañas de los andes peruanos.

“El campo se va a seguir sembrando, nunca va a parar, es una vocación antigua, somos el mayor exportador de papas, la mayoría siembra papas para el autoconsumo y luego se generan excedentes para el mercado”, acota.

Precios justos

Sobre la propuesta que en su momento hiciera el alcalde de Lima de que el Estado intervenga como un ente supervisor para fijar los precios de los alimentos, Soto Tenorio advierte que lo importante es que se brinde un precio justo.

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