Economistas del BCE informaron en un artículo publicado este jueves, que “los acontecimientos geopolíticos siguen traduciéndose en una fuerte imprevisibilidad en los mercados energéticos”. La circunstancia se ve reforzada por las iniciativas en curso para que los mercados europeos de la energía dejen de depender de los suministros energéticos de Rusia.

“Además, la transición verde puede incidir en los precios de la energía y contribuir a que haya períodos con una mayor volatilidad de los precios”, según los economistas del BCE.

También señalan de que “si la inversión en la producción de petróleo y gas se ajusta a los objetivos de cero emisiones netas, pero el suministro procedente de energías renovables no puede satisfacer sistemáticamente la demanda, se podrían producir episodios recurrentes de precios energéticos elevados y volátiles”.

Asimismo, mencionaron que las subidas de los impuestos sobre el carbono en la Unión Europea (UE) podrían agravar las presiones alcistas sobre los precios de la energía.

Sin embargo, agrega que la creciente descarbonización del sistema energético y la mejora de la eficiencia energética también conducen a que los precios de consumo de la energía en la zona del euro dependan menos de los precios internacionales de las materias primas y más de energías renovables más baratas, lo que, a largo plazo, podría tener un impacto bajista sobre ellos.

La evolución de los precios del gas y de la electricidad ha contribuido cada vez más a la inflación de la energía, pero con mayores diferencias entre países que en el caso de los combustibles líquidos.