Rusia podría suspender el suministro por gasoducto Nord Stream
junio 17, 2022
Escrito por: Oscar Hernández
Rusia señaló su preocupación de que los problemas técnicos con las turbinas de la empresa alemana Siemens podrían obligar a suspender el suministro a través del gasoducto Nord Stream. “Cuando todas esas turbinas sean enviadas a Canadá para su reparación, (el Nord Stream) puede pararse. Yo creo que eso será una catástrofe para Alemania”, dijo
Rusia señaló su preocupación de que los problemas técnicos con las turbinas de la empresa alemana Siemens podrían obligar a suspender el suministro a través del gasoducto Nord Stream.
“Cuando todas esas turbinas sean enviadas a Canadá para su reparación, (el Nord Stream) puede pararse. Yo creo que eso será una catástrofe para Alemania”, dijo Vladímir Chizhov, embajador ruso ante la Unión Europea (UE), en el marco del Foro Económico de San Petersburgo.
Chizhov instó a preguntar a Siemens sobre la necesidad de enviar las turbinas a Canadá. “No quiero dar consejos, pero en todo este tiempo ellos podrían haber aprendido a repararlas por sí mismos”, señaló.
Poco antes, el consejero delegado de Gazprom, Alexéi Miller, reconoció que, a día de hoy, no hay solución a los problemas técnicos, por los cuales ha tenido que reducir en los últimos días el suministro de gas a Europa.
Miller indincó que Siemens solo tiene una planta donde hacer estas revisiones técnicas de los motores y ésta se encuentra en Canadá. “Canadá impuso sanciones y ahora Siemens no puede sacar las turbinas” para devolverlas a Rusia, detalló.
También dijo que, debido a estos problemas, ha tenido que reducir las unidades compresoras en la estación de Portovaya, en la región de Leningrado.
Gazprom alegó problemas con las revisiones técnicas de las turbinas de Siemens cuando anunció, el pasado día 14, una reducción de 40% del suministro de gas a través del Nord Stream y, al día siguiente, otra adicional de 33%.
Alemania aseguró que ve una “intencionalidad política” en la reducción del suministro del gas ruso y una estrategia del Kremlin para provocar un incremento de los precios, una crítica que secundó la Comisión Europea (CE).