El Banco Central de Reserva (BCR) consideró que cuando entre en operación el puerto de Chancay (a fines del presente año) tendrá un efecto importante en la economía peruana, pero que debe trabajarse en mejorar las vías de comunicación y la habilitación urbana en la zona.

«Todavía no tenemos un estimado (de su impacto en la economía), pero creo que será importante, aunque no me atrevo a dar una cifra aún», dijo el presidente del BCR, Julio Velarde, durante la presentación del último Reporte de Inflación.

«No hemos hecho el análisis todavía. Hay que mejorar todas las vías de comunicación y también tendría que haber habilitación urbana en la zona», agregó.

El nuevo Terminal Portuario Multipropósito de Chancay, ubicado en el distrito del mismo nombre (provincia de Huaral), a 80 kilómetros de Lima Metropolitana, es un proyecto de inversión privada cuyos accionistas son la empresa de capitales chinos Cosco Shipping Ports Limited (CSPL) con una participación del 60%, y la peruana Volcan Compañía Minera con 40%.

El puerto de Chancay, cuyas obras tienen un avance de 70%, será un punto marítimo clave para el comercio entre Sudamérica y Asia, principalmente China (puerto de Shanghái), porque se convertirá en un hub regional que redistribuirá la carga de Perú, Chile, Ecuador y Colombia.

La construcción del puerto de Chancay genera 1,300 puestos de trabajo directos, y alrededor de 8,000 empleos indirectos por la dinámica económica que ya se observa en la zona.

Desde abril del 2011 se desarrolla el proyecto de diseño y construcción del puerto de Chancay, cuya inversión total superaría los 3,400 millones de dólares, de los cuales se ejecutarán 1,315 millones en la primera etapa.

Agroexportaciones

La logística de las agroexportaciones ganará una gran competitividad una vez que se ponga en marcha el puerto de Chancay, pues permitirá que los envíos agrícolas lleguen en menos tiempo a los mercados de Asia, garantizando mejores condiciones de los productos y generando importantes ahorros logísticos.

La disminución estimada será al menos 10 días en los embarques con destino a China.  

La reducción de tiempos de tránsito que ofrecerá este nuevo puerto representa una ventaja competitiva no solo para el país, sino también para otros países de la región como Chile, Ecuador y Colombia. 

Los productos agrícolas que requieran cadena de frío como la uva, palta, espárrago, arándanos, entre otros, se verán especialmente beneficiados, ya que al pasar menos tiempo en tránsito internacional llegarán en mejores condiciones a los mercados internacionales, lo que los hará más competitivos.

Hacia el mercado asiático aún hay productos con potencial de aumentar sus envíos. Por ejemplo, hacia China se puede aumentar los despachos de mandarinas y café sin tostar, que actualmente solo representan el 3% y 1%, respectivamente, de las agroexportaciones peruanas a dicho país.