Desafíos logísticos para la vacunación anti Covid-19 en el mundo
mayo 10, 2021
Escrito por: Jorge Choque
Política OCDE para la fabricación y distribución de vacunas. La desesperanza frente a la pandemia se disipó con la aparición de las vacunas de múltiples laboratorios. Sin embargo, la producción se concentra en un puñado de países y desde allí las dosis deben llegar al mundo entero, pues en cada rincón del planeta las personas
Política OCDE para la fabricación y distribución de vacunas.
La desesperanza frente a la pandemia se disipó con la aparición de las vacunas de múltiples laboratorios. Sin embargo, la producción se concentra en un puñado de países y desde allí las dosis deben llegar al mundo entero, pues en cada rincón del planeta las personas deben ser inoculadas. El desafío logístico no es menor. No solo contempla las distancias interoceánicas y terrestres, sino que además se debe mantener la cadena de frío en todo el transporte y almacenamiento. Por eso, es fundamental contar con un apoyo transversal del intercambio comercial global para facilitar la fabricación y movimiento de vacunas. La OCDE desarrolló un estudio sobre cómo el comercio y la cadena logística global pueden ayudar en la lucha contra el Covid-19 titulado “Using trade to fight COVID-19: Manufacturing and distributing vaccines”, con especial enfoque en los aspectos internacionales de la cadena logística de vacunas.
Vacunas para todos
Todos los países necesitan vacunas, pero no todos las pueden producir. Ahí está la primera barrera que hay que sortear en facilitar el acceso a vacunas a aquellas economías donde no son producidas, pero igualmente requeridas (especialmente en países en desarrollo). El documento de la OCDE también rescata que existen importantes interdependencias entre los bienes necesarios para producir, distribuir y administrar vacunas, como ampollas, jeringas, agujas, contenedores refrigerados, hielo seco para mantener las bajas temperaturas y congeladores para el almacenamiento. Promover la comunicación entre los actores involucrados en cada uno de los pasos y procesos es fundamental para agilizar el traslado de vacunas; por ejemplo, conectando fabricantes con potenciales distribuidores.
Otro desafío tiene que ver con mantener las vías comerciales y mercados abiertos. Las cuarentenas sucesivas y otras medidas de restricción de movilidad han ido cerrando mercados, dificultando los flujos normales de comercio de bienes, perjudicando la distribución (tanto exportación como importación) de vacunas. Mantener los mercados abiertos y disponibles es fundamental para que las vacunas salgan del origen y lleguen a destino en tiempos prudentes. Lo mismo con las tarifas: mientras más altas, más encarecen el traslado y acceso.
Un esfuerzo global
Alrededor del mundo, 208 economías importan vacunas, las cuales son producidas por apenas 90 países, los cuales están todos en el hemisferio norte y con alta concentración en la Unión Europea… pero para el total de vacunas de uso humano, pues para el caso de las vacunas contra el coronavirus, menos de una decena de laboratorios han logrado producir una fórmula para combatir la pandemia. En este contexto, el documento de la OCDE destaca que la cooperación internacional se posiciona como una alianza necesaria para sacar adelante una distribución exitosa de vacunas en todo el planeta, a tiempo para detener las terceras y hasta cuartas olas de contagios de muchos países, pues con cada recaída las economías sufren en su totalidad. Políticas comerciales y agilización de procesos aduaneros serían claves, especialmente en casos donde no hay acuerdos de comercio establecidos, que es donde se producen los cuellos de botella con los procesos de importación.
El estudio destaca, además, que es importante considerar los cuatro pasos de la cadena logística de las vacunas: descubrimiento y desarrollo; producción en masa; distribución y administración; y logística inversa. Todos estos pasos deben realizarse en perfecta coordinación para todos los mercados para una llegada oportuna de las dosis a los países, donde la cadena logística comienza mucho antes de la distribución de las vacunas, sino que se inicia con la obtención de los insumos de producción y empaque, seguidos de los requeridos para el almacenamiento y transporte. China, Alemania y Estados Unidos destacan entre los principales proveedores de contenedores refrigerados, portadores de vacunas, congeladores, tapas de goma, frascos, jeringas, agujas, estabilizadores, adyuvantes y preservantes.
Desafíos de la producción
En tiempos ‘normales’, es decir, sin pandemia, la producción de estos insumos y su obtención es parte de una cadena logística que fluye con tiempos y volúmenes de carga esperables y predecibles, pues la demanda por vacunas que se comercializan de manera permanente es estable. Pero en tiempos en que se necesitan altos volúmenes de una misma vacuna -sin dejar de producir las otras que siguen siendo necesarias para prevenir brotes de enfermedades infectocontagiosas controladas- el desafío por aumentar producción también se extiende hacia los proveedores de todos los insumos necesarios, lo cual a su vez afecta la cadena logística en su totalidad, demandando más volumen desde las materias primas hasta los frascos y jeringas.
Concentrar los puntos de exportación y distribución será clave en un esfuerzo por mantener la fluidez de tanto la producción como los envíos de vacunas a todo el planeta, aprovechando todas las vías y rutas de transporte: aire, mar y tierra.
Fuente: MundoMarítimo